jueves, 17 de septiembre de 2009

Madame Bovary

Si han leído Madame Bovary de Gustave Flaubert sabrán que es una novela durante la corriente del realismo que fue controversial en su momento, en Francia para ser específicos; y que hasta el día de hoy hemos leído con gran entusiasmo algunas mujeres...
El entusiasmo se generaba porque todas queriamos ser Madame Bovary, obviamente solo en el climax de la lectura, porque su final es un poco triste.
Yo recuerdo haberla leido durante mi vida universitaria, donde tomé un gran afecto por devorarme los libros, pero no los libros de química que eran los propios de mi estudio, sino los libros de literatura que alguna vez me dejaron leer durante la preparatoria y que no leí porque me dejé llevar por el glamour vacío del pedregal que solo se atrevía a pensar en estrenar un nuevo par de zapatos (algo triste por cierto). Sin embargo, durante la Universidad leí mucho, desde Platero y yo de Juan Ramón Jiménez hasta Anna Karenina de Liev Tolstói: que habla de un romance desenvuelto en las esferas de la alta sociedad y que la frase más representativa es la que grabó Anna Karenina

Traté de vivir mi vida.... sin herir a nadie....
Lo curioso de todo esto es que he tenido dos grandes amores en toda mi vida... uno se presentó justo durante la Universidad, y por lo tanto cada novela que leía me hacia sentir protagonista y obvio el susodicho era mi co-protagonista, soñando vivir en un mundo novelesco de amores intensos con sombra de ruina.
Hoy por hoy, mi vida es algo diferente: estoy casada, tengo demasiado trabajo y casi no leo o leo poco, nada en comparación con mis tiempos universitarios, nada comparado con el hambre dia tras dia de acabarme un capítulo y luego soñar pensando en lo que leí. Qué vida!!!! Pienso que he perdido un poco de mi capacidad para soñar, que la vida colorida que imaginaba para mi ha venido siendo de colores primarios dificiles de mezclar. Es por esta razón que decidí escribir hoy sobre Madame Bovary, porque me recuerda algo intenso de mi que no sé donde quedó, no sé donde lo tengo guardado y si quizá lo he olvidado o lo he perdido en mi caminar.
Estoy melancólica hoy, estoy rascando en mi cabeza queriendo encontrar una grandeza que me haga sonreir. Ahhhh, hoy estoy melancólica... quiero gritaaaar y a la vez callar... quiero llorar con una sonrisa... quiero temblar y sentirme segura... quiero vivir tan intensamente como alguna vez lo hice...
En fin, amo la lectura o mis recuerdos de ella. Hoy quiero ser yo en una letra grabada en el espacio del tiempo que lleve más allá de mi voz un recuerdo furtivo de quien era yo, de quien soy yo...
Creo que estoy enamorada, creo que estoy melacólica, no sé que me pasa me siento distinta y quise escribir...